
Pues sí, este año me ha pillado el toro. He estado a uvas desde antes de y después del Luminaria, y de pronto ha llegado octubre y me encuentro con pilas de libros para leer y sin tener ni siquiera planificadas mis lecturas de autoras. Así que toca ser resolutiva y eficaz y ponerse manos a la obra, haciendo de la necesidad virtud.
¿Decía que tenía pila de libros para leer? Pues muchos de ellos son de autoras, por lo que entran automáticamente en la lista de mi #LeoAutorasOct. Alguno, también de autora, estaba en la pila de «leídos y para reseñar», así que, como se trata no solo de leer, sino también de recomendar autoras, haré un poquito de trampa –solo un poquito– y los reseñaré en octubre, aunque los haya leído durante el verano.
¿Y cuáles son esos libros? Pues para eso es esta entrada, para contártelo y, de paso, organizarme yo. Vamos al lío. Empiezo con las «trampas», que serán las primeras reseñas en salir, y después las lecturas pendientes. Si solo con ver las portadas o con mi breve comentario te entran unas ganas irresistibles de comprar algún libro, pinchando en la imagen correspondiente irás una página de compra. De nada.

Los ocultistas, de Polly Schattel (Dilatando Mentes)
Este es el libro en cuya reseña estaba trabajando cuando me pilló el toro. Polly Schattel, además de escritora, es directora de cine multipremiada y orgullosa transgénero. Este libro cuenta algo así como una historia detrás de la Historia, en la que se entremezclan hechos y personajes reales con una oscura fantasía centrada en el mundo del ocultismo y lo esotérico. No digo mucho más sobre él para no pisarme la reseña a mí misma.

Uke, El Contrincante, de Elia Barceló (Minotauro)
No creo que Elia Barceló necesite presentación alguna a estas alturas, aunque sí diré –no es ningún secreto– que es una de mis autoras favoritas. Uke es la primera novela larga que escribió, como ella misma cuenta en el prólogo, aunque no la primera que publicó. Esta reedición de Minotauro añade precisamente el prefacio que acabo de mencionar y el título que Elia siempre quiso que tuviera su obra –la edición original se titulaba simplemente El contrincante.

El Señor de la Noche, de Tanith Lee (Duermevela)
Tengo que reconocer que esta prolífica y multipremiada autora británica es una de mis grandes lagunas en obras de fantasía. Así que agradezco infinitamente a la editorial Duermevela su labor de recuperación de autoras olvidadas o ya descatalogadas en castellano, como es el caso. Es precisamente el libro que estoy leyendo ahora y, de momento –llevo dos capítulos–, solo diré que tiene… un sabor especial.

Mascota, de Akwaeke Emezi (Crononauta)
La última novedad de Crononauta viene firmada por Akwaeke Emezi, persona no binaria de origen nigeriano, que alcanzó notoriedad con su primera novela Freshwater –traducida al castellano como Agua dulce (consonni, 2021)–, en la que tocaba temas como la identidad de género, el racismo, el trauma y la fragmentación de la personalidad. Seguro que Mascota no me defrauda y viene a romperme los esquemas y sacarme de mi zona de confort.

Guerra de Jade, de Fonda Lee (Insólita)
Esta es la esperadísima segunda parte de La saga de los huesos verdes, trilogía cuya publicación en España se inicia con Ciudad de Jade (Insólita, 2019). Su autora, Fonda Lee, ha sido finalista de los premios Nëbula y Locus, y ha ganado el premio Aurora –el «Ignotus canadiense»– y el World Fantasy. Además de escritora, es cinturón negro en artes marciales y aficionada a las películas de acción, lo cual, sin duda, se refleja en sus novelas. Al menos por lo que he leído de esta saga.

El hechicero de la Corona, de Zen Cho (Duermevela)
Esta novela es la primera parte de una serie de fantasía y ganadora del British Fantasy Award. Su autora ya es conocida por los aficionados y aficionadas españoles, ya que es finalista de los premios Ignotus de este año en la categoría de Mejor Cuento Extranjero con La mujer de terracota (Duermevela, 2021). Este último lo pude disfrutar este verano –fue parte de mi botín del Celsius–, así que tengo muchas ganas de volver a leer a esta autora.

Esperando a Dulcinea, de Blanca Mart
Uno de los objetivos de la iniciativa #LeoAutorasOct es que hagamos el esfuerzo de conocer nuevas autoras, que traten géneros y temáticas que se salgan de nuestras respectivas zonas de confort, y para ello se elaboran cada año el bingo y el calendario. En este caso, yo me voy a salir de mi zona cómoda, pero con salvavidas. Me explico: Esperando a Dulcinea es una colección de cuentos románticos, sin elemento fantástico. No es mi rollo. Pero… son de Blanca Mart. Ese es mi salvavidas. Estoy segura de que los voy a disfrutar.
¡Me ha encantado la lista! El de Los ocultistas no lo conocía y tiene pinta de lectura perfecta para cuando empiece a hacer un poco más de fresco. Es que hasta la portada queda bien jajaja
Pues si te digo que me lo leí en verano, a pleno sol… 🙂 En breve habrá reseña de Los ocultistas en el blog. ¡Gracias por el comentario!